Hola!
Hoy me lanzo con esta nueva sección en mi blog "Ñam Ñam". Después de que el pasado domingo colgase algunas fotos en Instagram mientras elaboraba una Jarera (o Jarira, según su pronunciación en árabe), algún@s seguidores me pidieron que publicara la receta. Y allá voy.
Ante todo quiero explicaros que este plato marroquí es tradicional durante el mes de Ramadan y se suele utilizar para romper el ayuno. Como yo hace 20 años que no como carne, siempre lo he hecho vegetal, y ahora que soy mamá lo he versionado para que no quede tan fuerte de sabor para los niños (no le pongo picante, por ejemplo, entre otras cosas).
Es largo de elaborar, aunque no demasiado entretenido, su dificultad es baja, pero como cualquier olla de cocido, necesita sus tiempos. Yo aprovecho los intervalos entre paso y paso para hacer tareas en casa, ducharme, o atender y jugar con mi niño.
Antes de empezar con la receta en sí, quiero daros algunos datos importantes por aquello de las intolerancias o dietas especiales.
Esta receta contiene gluten y huevo.
Si bien es posible substituir la harina de trigo por otra sin gluten (maíz, espelta, garbanzos...), y la pasta de fideos por algunos sin gluten o bien por alguna sémola que tampoco contenga gluten.
En cuanto al huevo, con no ponerlo es suficiente.
No contiene lácteos.
Ingredientes para 5 litros de sopa
Aceite de oliva
3 ramas de apio (completas, con sus hojas y todo)
4 tomates maduros no muy grandes
1 cebolla
Entre 150gr y 250gr de tomate triturado (esto va a depender de la intensidad de sabor que le queráis dar, yo prefiero menos)
1 cucharadita de pimentón rojo
1 cucharadita de cominos molidos
perejil picado
2 cucharadas soperas de sal
2 cucharadas soperas de harina
1 bote de garbanzos cocidos (si queréis que se vean poco que sea de los pequeños, pero podéis ponerlo de los grandes para que aparezcan más)
100gr de fideso finos 0 ("cabello de ángel")
1 huevo grande o 2 pequeños
5 litros de agua.
Principales utensilios para su elaboración:
1 olla grande (yo la preparo en olla de 6 litros para que me dé más margen y no se me derrame)
1 cuchara para remover (preferiblemente de madera)
1 batidora de mano
Tabla y cuchillo para cortar
Bol y tenedor para batir el huevo
Paso a Paso:
Trocear la cebolla, el apio (quitarle algunos hilillos del tronco para que luego no se queden en el caldo) y los tomates.
Cubrir el fondo de la olla con aceite de oliva y calentar.
Añadir la cebolla y el apio y rehogar. Cuando empiecen a pochar, añadir los tomates.
Añadir el perejil picado, el pimentón rojo y los cominos.
Añadir un vaso lleno de agua para ayudar en la cocción. Dejar cocer 15 minutos.
Apartar la olla del fuego y triturar todo bien con la batidora.
Llenar con los 5 litros de agua.
Mientras vuelve a coger hervor el agua vamos a preparar los garbanzos. Como yo tengo problemas intestinales y los pellejos de los garbanzos me sientan bastante mal, me entretengo a pelarlos. Además no me gusta ver los pellejos flotando en la sopa. Este es un paso entretenido, pero si te pones una buena música de fondo, se te hace más ameno!
Ahora vamos con la harina: su función es darle espesor a la sopa para que no quede muy aguada. Ponemos las dos cucharadas en un bol y le añadimos el agua de la sopa que ya estará calentita.
Lo removemos bien con un tenedor o barilla para que quede bien disuelta y con pocos grumos (si queda alguno no pasa nada, se terminarán de deshacer dentro de la olla).
Añadimos a la olla y removemos con la cuchara de madera durante un rato. Pensad que si la harina no se une bien con el agua, se va a ir al fondo de la olla. Removed un rato. Dejar cocer 20 minutos.
Añadir los garbanzos y dejar cocer otros 20 minutos (aunque ya estén cocidos, suelen ser duros, y es mejor darles otro poco más de cocción para que queden más blanditos). Si preferís comprar los garbanzos cocidos a granel, no os hará falta porque estos ya están casi "deshechos" por la cocción.
Añadir los fideos y dejar cocer durante 15 minutos.
Apagar el fuego. Batir el huevo y añadirlo poco a poco mientras no dejamos de remover con la cuchara.
Nota: se puede congelar.
¿Qué os parece esta sopa? La verdad es que es muy recomendable en invierno y, un aviso: si os tomáis una taza por la noche os auguro un sueño profundo!
Estaré encantada de recibir vuestro comentarios, sugerencias, dudas, etc.
Un abrazo.